oct 08

La credibilidad de la prensa

Tag: Prensa Ignacio Escolar @ 14:22

José Sanclemente

Hace tiempo que le doy vueltas a la responsabilidad social que tiene la prensa sobre todo en momentos díficiles como los que viven los ciudadanos de nuestro país en estos momentos.
Cuando se amontonan las noticias sobre la dificil situación económica junto con casos de corrupción política, y gobierno , oposición, instituciones financieras y hasta culturales están en tela de juicio y forman parte de los titulares diarios, es más necesaria que nunca la transparencia e independencia en los medios. De lo contrario los ciudadanos acabamos poniendo todo el mismo saco del escepticismo y pesimismo porque los diarios no nos sirven de contrapoder .
Si el ciudadano llega a pensar que las empresas periodísticas modulan la información en pro de sus intereses y se intercambian favores con los poderes políticos y económicos sometiéndose a la voluntad de los lobbies en lugar del interés de la audiencia , les auguro un fracaso rotundo a medio plazo aunque puedan disfrutar a corto de los incentivos del poder al que se someten.

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20 comentarios en “La credibilidad de la prensa”

  1. # David dice:

    Bueno, en realidad, yo creo que esa es la creencia popular, incluso de muchos de los periodistas. ¿El consuelo? Que los propios medios chocan en sus intereses según las empresas a las que pertenecen y, por tanto, contrarrestan la lucha de poder. Sería de cínicos negar que los medios son partidistas, lo son, pero aún así, el sistema funciona por esa confrontación de intereses… siempre y cuando el ciudadano no sea fanático de un sólo medio, claro está. Lea, compare y… tendrá información.

  2. #0 ipon dice:

    Pues ahí están los medios, al borde del precipicio. Llega tarde el análisis.

  3. #0 Richi dice:

    Completamente de acuerdo, hace falta transparencia e independencia. Pero también un poco de ortografía (¿excepticismo?)

  4. #0 Flashman dice:

    Dice el pollo:

    “Si el ciudadano llega a pensar que las empresas periodísticas modulan la información en pro de sus intereses y se intercambian favores con los poderes políticos y económicos sometiéndose a la voluntad de los lobbies en lugar del interés de la audiencia”

    ¿Pero donde ha vivido este tío los últimos 25 años?

  5. #0 Jordi dice:

    #4 ¿Que dónde ha vivido Sanclemente? Busca su nombre en google y verás. Fue consejero delegado del grupo Zeta y consejero delegado de la división de medios de Planeta. Vamos, que sabe algo del tema.

  6. #0 Kuryakin dice:

    ¿Si llega a pensar?.

    Está absolutamente convencido.

  7. #0 Nynaeve dice:

    Y este análisis viene, porque tras el descrédito mayor de la clase política detrás está yendo la de la información…

    A buenas horas mangas verdes…

  8. #0 Flashman dice:

    #5

    Sabrá del tema, pero habla como si no fuera consciente del periodismo que se ha hecho en España las dos últimas décadas.

  9. #0 No soy pepa y antes era otra pero llamenme Doña dice:

    Ufff…

    Pues a las guerras del fútbol me remito. La última batalla hace unos días. Estómagos agradecidos, otros indigestados y otros con problemas de bilis. Le di unas vueltiñas a esto en mi blog.

  10. #0 Lanarch dice:

    El enlace al original no me tira.

  11. #0 Luihma dice:

    “Si el ciudadano llega a pensar que las empresas periodísticas modulan la información en pro de sus intereses y se intercambian favores con los poderes políticos y económicos sometiéndose a la voluntad de los lobbies en lugar del interés de la audiencia…”

    O sea, que lo de Mediapro alabando a Zapatero, Prisa ahora pasando de las descargas de fusilería en los titulares a artillería de combate, y Pedro J predojoteando ¿no es exactamente eso?

  12. #0 lukas dice:

    Esto también tiene su lado divertido. Ayer, en una cafetería madrileña se levantó del lugar de al lado un tipo muy trajeado que leía La Razón. Aproveché para darle el cambiazo dejándole Público, y llevándome el otro. Me imagino al individuo preguntándose en voz alta quien habría sido el hijoputa.
    Por lo demás, la portada de hoy de El Mundo, inmunda como casi siempre, carro obsoleto en el que viajaba el cabo muerto en Afganistán y una mierdita abajo a la derecha sobre la Gurtel. Vomitivo.

  13. #0 morisco dice:

    Más bien creo que la “prensa” hace tiempo que tomó partido por cada uno de los dos grandes grupos políticos. Creen que pueden incidir en las formas de gobernar un pais y lo que es más grave, piensan que pueden poner o quitar gobiernos a su antojo. En Spain el tema estaba bastante igualado hasta ahora que ha sufrido un gran desequilibrio con el transfugismo del traidor grupo prisa.
    SALUD

  14. #0 mikel dice:

    También sucede el amodorramiento del oficio porque los ofician­tes han perdido toda inquietud, han de­jado de buscarle fisuras a la inercia pro­fesional y jamás ponen en solfa el cate­cismo de sus patronos. Resulta hoy sor­prendente comprobar esa visión despe­jada de la realidad que se colaba en al­gunas de las desaparecidas secciones de laboral o tribunales durante los años ariscos del franquismo.

  15. #0 Luis Manuel dice:

    ¿Cómo se produce el proceso de objetivación de la información?

    Una información en principio subjetiva, se discute en distintos niveles de la sociedad y dependiendo de los medios y las personas que respaldan dicha información, se descarta, es decir, entra a formar parte del conocimiento marginal o se legitima, lo que significa entrar a formar parte del conocimiento globalmente aceptado

    Una vez legitimada esta información, consideramos de forma popular que dicha información es objetiva. O sea es un proceso de conformidad social, por decirlo así.
    Este es el proceso fundamental de legitimación de una información.
    Detengámonos por un momento a analizar las fuentes principales que interactúan en el proceso de legitimación:

    – Los medios de comunicación masivos (convencionales) o “mass media”.
    – Las autoridades que se posicionan a favor o en contra de dicha información

    Lo paradójico radica en que si uno coge varios periódicos encuentra las mismas noticias.Lo mismo pasa en los medios televisivos. La variación se encuentra en el tratamiento “informativo”, además mezclando “información” y “opinión”.

    Esto sucede porque las noticias son canalizadas por una o varias agencias siendo una la predominante en un estado, zona geográfica o zona supranacional.

    Muchas veces observamos la misma errata en todos los medios. Se han nutrido de una noticia de una agencia, y no han cuestionado la información, contrastado o simplemente la toman como “legítima”.

    Si todos los medios de comunicación principales beben de la misma fuente, quien controla dicha fuente, no controla la realidad que conocemos?

    Si todos los medios de comunicación principales beben de la misma fuente, quien controla dicha fuente, no controla la realidad que conocemos?

  16. #0 Luis Manuel dice:

    Y añado citando un comentario al hilo de lo anterior, “las noticias que aparecen en los “mass media” responden a los intereses de unos pocos, y no a los intereses del bien común, como se nos intenta hacer creer.
    Así que si estos, son la fuente principal de objetivación de las informaciones que nos inundan diariamente, tenemos un grave problema… ¿La información que se nos vende como objetiva, es legítima realmente?

    Si queridos amigos, somos los corderitos de unos pocos lobos, que manejan el universo simbólico y construyen concienzudamente la realidad que nos rodea, es decir, la que sirve a sus intereses.”

    “Respecto a las autoridades que legitiman las informaciones, ¿Quienes creéis que les otorgan el poder para comunicar y llegar a las masas? ¿Quien les encumbra y les otorga popularidad, que se traduce erróneamente como autoridad? ¿Y quien les destrona y les arrastra por el fango cuando conviene?”

    La sociedad de la información…

  17. #0 Josep Lluis dice:

    Los periodistas “informan” (véase que lo pongo entrecomillado), aquello que les interesa. Si son de izquierdas remueven la m….. de los partidos de la derecha y si son de derechas, hacen lo mismo, pero metiendose con las izquierdas. Si son del Madriz, echan pestes del barça a la vez que se les llena la boca cuando informas sobre su equipo omnipotente. Si son del barça, hacen exáctamente lo mismo pero criticando al Madriz. Si no tienen noticias importantes para revelar al ciudadano (mira que hay noticias importantes)no se les ocurre otra que enseñarnos el primer día de escuela del nietísimo del Rey o la reunion de Zapatero/Rajoi, ambos con LA MISMA CORBATA.

    Además confunden el salvaje asesinato con “violencia machista” o llaman SEÑOR al fulanito de tal, que HA ROBADO

  18. #0 Josep Lluis dice:

    …sigue del comentario anterior, pido disculpas.

    …dinero público, en vez de llamarlo LADRON.

    … o hacen programas de alto interés cultural, como gran hermanos, norias o bazofias de este estilo.

    …o contratan a personajes de la cultura para “entretener” al ciudadano, como la señora Belén Esteban.

    ¡Periodistas! ¡lo que estarán pensando sus padres, con los sacrificios que les habrá costado a algunos pagarles la carrera!

  19. #0 Josep Lluis dice:

    Se me olvidó decir que una de las inquietudes que más preocupan a las empresas periodisticas, tanto audiovisuales como prensa escrita, es la obsesión por informar de los índices de audiencia o cantidad de diarios vendidos. Lo curioso es que todos son líderes en el sector, cosa que amí, como ciudadano, me importa más bien poco, o nada. Lo que yo valoro es la información y el interes en informar, sobre todo, de forma seria, responsable e imparcial y cuando sale alguien hablando de audiencias, automáticamente cambio de cadena o dejo de comprar ese periódico.

  20. #0 Josep Lluis dice:

    Me repatea, además, que un “periodista”, haciendo uso y abuso del poder que le otorga el estar a diario frente a un micrófono y por lo tanto, ante una cantdad respetable de oidos, nos dé su opinión en vez de dar y desarrollar una noticia importante, de interés y contrastada. ¿Qué pretende? ¿Convencernos? ¿de qué? Aun queda gente inteligente en este pais capaz de entender una situación y desarrollar una opinión propia y sobre todo dar una lectura real de algunas cosas o de algunas personas que hacen, jústamente, lo contrario de aquello por lo que cobran.