jun 10
Playas y piscinas: manual de instrucciones
“El baño al aire libre en playas o piscinas es altamente higiénico y saludable, pero con pretexto de él se cometen gravísimos escándalos.
Lo ideal sería la separación absoluta de sexos, como se ha establecido ya en algunas playas beneméritas y en muchas piscinas públicas. Pero, como es muy difícil que se generalice esta sana costumbre, he aquí las normas a que han de atenerse las personas de buena conciencia que no quieran cargar con la grave responsabilidad del pecado de escándalo”
Más
Gracias, Alejo
junio 10th, 2005 a las 13:29
Hombre, no estaría de más indicar que la fuente es:
Antonio Royo Marín. Teología Moral para seglares BAC (1961)
junio 10th, 2005 a las 13:35
La parte del baile agarrao es la monda.
junio 10th, 2005 a las 13:37
supongo que dentro de 40 años todos nos reiremos con la estupida polémica de las bodas homosexuales. o tal vez no todos (hazteoir)
junio 10th, 2005 a las 13:42
En el pueblo en el que trabajo, hace 22 ó 23 años, todavía existía una piscina a la que sólo iban hombres o mujeres en días alternos. Le llamaban “la piscina del cura” -eran terrenos de la Iglesia-.
Por cierto, que muchas de esas ordenanzas que ahora nos resultan tan extrañas, permanecen vigentes porque nadie se preocupó de derogarlas expresamente. Hace poco estuve releyendo una de “Policia y buen gobierno” que regulaba cuántas escupiteras eran necesarias en una peluquería de caballeros, 😀
junio 10th, 2005 a las 14:00
En Huesca este verano no hay piscinas.
junio 10th, 2005 a las 14:01
En el pueblo de mi madre, en Cuenca, la piscina municipal tenía un bar cuya terraza daba a la piscina, y durante la semana se podía ver al párroco del lugar oteando el panorama. Los domingos soltaba sapos y culebras, y señalaba con el dedo a los pecadores y pecadoras que frecuentaban aquel inmoral antro de perdición y lujuria. Hablo de los 80, ahora como el pueblo solo se llena en verano, ya no conoce a todo el mundo y se corta más..
junio 10th, 2005 a las 14:44
Joer, el teólogo este se ponía cachondo con cualquier cosa… :-DDD
junio 10th, 2005 a las 14:47
atp, has dado en el clavo, la perversión donde vive es las mentes de curas y puritanos de toda ralea por eso tratan de prohibir lo que ellos maquinan en sus diezmados y enfermos cerebros.
junio 10th, 2005 a las 16:27
Huesca: no me lo recuerdes que he tenido que modificar mi itinerario vacacional a última hora.
junio 10th, 2005 a las 17:02
Decía Eye del Cul en el otro post (el de las pedorras de la boina)
“Leyéndolos, cualquiera diría que el PSOE va a montar “centros de reeducación” para convertir en drag-queens a nuestros machos ibéricos.”
De campos de reeducación, pero en sentido inverso, sabían bastante los del antiguo régimen, ése que intentan rehabilitar a la desesperada los revisionistas que marcan la agenda de la actualidad (lean el excelente artículo de Soledad Gallego-Díaz en El Pais de hoy, por los clavos de Cristo).
Un fragmento de la historia de verdad, la de los infames, la de los hijos de puta que ahora se presentan como víctimas cuando siempre (siempre) han representado el papel de verdugos. Que dejen de tomarnos el pelo, hombre:
“Juan Curbelo pertenece a la primera generación de gays presos por su orientación sexual y su pertinacia en sostenerla y no enmendarla. Con la cabeza rapada, le embarcaron rumbo a Fuerteventura, la isla más seca del archipiélago, un lugar que hasta la explosión del turismo era sinónimo de alejamiento y desolación, donde los sucesivos gobiernos que vivió España en el siglo confinaban a sus enemigos.
Tefía fue un infierno de palizas, trabajo hasta el agotamiento, privación, calor insufrible de día y noches frías. Y Juan, al que con 16 años se le salía la vida a chorros, fue incapaz de doblegarse, de callar y aguantar: por rebelde y por insumiso, su estancia era una sucesión de palizas y su condena se alargó hasta apurar el máximo en aquella cárcel cuartel. Tres años estuvo siguiendo la misma rutina: al amanecer, instrucción y doctrina.Todos los presos cantaban «España, patria querida / Somos tus hijos…» antes de desayunar gofio con café de cebada. De ahí partían a picar piedra para la construcción o a cavar zanjas bajo la mirada de los guardias, siempre con la garrota en la mano. Paraban para comer un pan de tres días y fideos con carne de cabra, dormían un rato de siesta y de nuevo salían a picar bajo un sol inclemente hasta la caída de la tarde. Antes de cenar guisantes con batata, un poco de instrucción en la escuela: primeras letras, historia sagrada y el rezo del rosario.”
http://www.el-mundo.es/cronica/2003/423/1069683006.html
Tiene cojones aguantar a esta chusma. A galopar hasta enterrarlos en el mar.
junio 10th, 2005 a las 17:07
El archivo o los centros de menores
SOLEDAD GALLEGO-DÍAZ
EL PAÍS – España – 10-06-2005
Según el diccionario, “provocar” significa, coloquialmente, “vomitar lo contenido en el estómago”. Es bastante gráfico y se aplica muy bien a algunos personajes de la política y de los medios de comunicación españoles. Las personas que hacen de la provocación su principal motivación tienen, generalmente, muy poco interés intelectual, pero consiguen un enorme protagonismo mediático, porque la provocación consiste, precisamente, en obligar al otro a reaccionar o responder a lo que ellas quieren. Su principal éxito es cambiar “la agenda” de los ciudadanos; impedir que se hable de lo que le importa a los otros, tan irritados por lo que oyen que ceden su propio interés ante la urgente necesidad de “responder”.
¿Por qué estamos todo el día hablando de identidades? ¿Qué sentido tiene manifestarse para impedir que unos documentos se trasladen de un archivo a otro, cuando, por otra parte, quedan facsímiles de esos documentos en su lugar de origen? ¿Hay que seguir atendiendo, y contestando, hasta la eternidad, a quienes niegan la evidencia de lo que ocurrió el 11-M?
Es mucho más importante lo que ocurre en los centros de menores de Canarias que lo que pasa en el archivo de Salamanca. Y sería lógico que los ciudadanos se sintieran más impresionados por la muerte de una muchacha de 16 años, encerrada en un centro de menores de Tenerife (pese a que su psiquiatra recomendara vivamente que no se le dejara sin asistencia médica ni psicológica) que por el destino físico de 3.000 o 20.000 documentos. ¿Cómo es posible preocuparse más por el lugar exacto, Castilla y León o Cataluña, en el que se van a archivar 300 legajos históricos que por las 700 denuncias, 20 incendios y dos muertes que se han producido en los centros de menores de Canarias?
Y si se trata de poner la cultura por encima de todo, entonces lo razonable sería empezar a movilizarse contra el aumento del número de alumnos por aula que ha decidido, con toda tranquilidad, la Comunidad de Madrid. El 48% de las aulas de los colegios concertados y el 12% de los colegios públicos tienen más de 25 escolares, la cifra máxima que fija el Ministerio de Educación (y más que la media fijada por los expertos europeos). ¿Qué se ha hecho? Simplemente se ha autorizado meter entre 28 y 30 niños en cada grupo. Brillante.
Los responsables de la Comunidad de Madrid llevan semanas hablando más del derecho (inexistente) de las víctimas del terrorismo a que sus opiniones políticas se conviertan en política gubernamental que de los problemas escolares de los niños de la ciudad o la persistencia de las listas de espera en la asistencia sanitaria. Lo extraño no es que dediquen tanta atención a una cosa y tan poca a la otra. Lo extraño es que a los ciudadanos, bombardeados por los provocadores de turno, no les parezca nada raro.
Caer en la provocación tiene otra importante vertiente dañina: que hombres y mujeres honorables y decentes se sientan obligados a defenderse de una descalificación personal y gratuita. ¿Qué país es éste en el que alguien como el ex presidente del Congreso de los Diputados Gregorio Peces-Barba, uno de los mejores representantes del respeto político, la tolerancia y la amistad cívica, tiene que salir en su propia defensa, sin que se alcen las voces enfadadas de sus antiguos compañeros de la etapa constitucional, conocedores de su historia y de su valor? No se trata de que Peces-Barba sea socialista o no. Militara en el PP, en el PSOE o en IU sería una persona igualmente valiosa.
El alto comisionado dimitirá finalmente si se ve imposibilitado para llevar adelante su trabajo o, en el fondo, si así le place al señor Alcaraz, pero las víctimas del terrorismo deberían saber que nunca van a tener a su servicio a alguien más intelectualmente valioso, más respetuoso y honesto que Peces-Barba y que si creen que sus intereses están mejor cuidados con el presidente de su asociación que con el consejo y apoyo de este profesor están profundamente equivocados. Es como si en Francia un día despreciaran a Simone Veil, la primera presidenta del Parlamento Europeo, premio Príncipe de Asturias de la Concordia, simplemente porque le conviniera a un partido determinado. solg@elpais.es
junio 11th, 2005 a las 11:19
Señores pasajeros bsgsgsé, y todo eso. Se recuerda que blablablá El País… sus contenidos.. copyright.
Lo que quiero decir, es que si bien no hay punto de comparación con la intensidad y persistencia del bombardeo a que nos sometía Balto con su Pijo Mema y su liberdaddigieso, sigue sin estar bien eso de pegar un artículo al completo y obligarnos a todos a leerlo por güevos (aparte de aquello del copyright que decíamos, que si los señores de El País quieren influenciar intelectualmente a más gente, que se publiquen sus cositas bajo CC, coño!).
¿Qué tal si mejor un párrafo destacado y enlace a la fuente? O si no está online, ¿qué tal un COMENTARIO-EXPLICACIÓN de lo leido y su correspondiente-obligada referencia bibliográfica?
Graaaaaaaacias. ¡¡Y abróchense el cinturón, YPUNTO!! ¡¡El de la tercera fila, que apague el pitillo, si no quiere que le desaloje en pleno vuelo!! ¡¡Señora, ate al niño antes de que nos desarme al piloto!!
junio 12th, 2005 a las 04:18
Estos tipos me merecen una estima igual a cero desde que me banearon de los foros de HazteOir con la peregrina excusa de que era oyente de la SER y lector de ElPais. Las pruebas:
http://akin.blogalia.com/historias/30460#comentarios